EE.UU. condena a un ciudadano iraní por evadir sanciones, trasladando US$ 115 millones de Venezuela a través de EE. UU.

El Departamento de Justicia de EE. UU. ha acusado a Ali Sadr Hashemi Nejad por su presunta participación en un plan para evadir las sanciones económicas de EE.UU. contra Irán, defraudar a EE.UU., y para lavar dinero y realizar fraude bancario.

Sadr fue acusado de participar en un plan en el que más de US$ 115 millones de pagos para un complejo de viviendas venezolano se fueron canalizados en forma ilegal a través del sistema financiero de EE.UU., en beneficio de individuos y entidades iraníes.

En agosto de 2004, los Gobiernos de Irán y Venezuela firmaron un acuerdo por el cual acordaron cooperar en ciertas áreas de interés común. Al año siguiente, ambos gobiernos complementaron el acuerdo mediante la firma de un Memorando de Entendimiento en relación con un proyecto de infraestructura en Venezuela, que involucraría la construcción de miles de unidades de vivienda en Venezuela.

El proyecto fue liderado por Stratus Group, un conglomerado iraní controlado por Sadr y su familia con operaciones comerciales internacionales en las industrias de la construcción, banca y petróleo. En diciembre de 2006, el Grupo Stratus incorporó una compañía en Teherán, que entonces se conocía como Iranian International Housing Corporation (IIHC).

En relación con su papel en el proyecto, Sadr tomó medidas para evadir las sanciones económicas de EE.UU. y defraudar a los bancos estadounidenses al ocultar el papel de Irán y las partes iraníes en los pagos en dólares estadounidenses enviados a través del sistema bancario de EE. UU. Por ejemplo, en 2010, Sadr y un conspirador utilizaron pasaportes de St. Kitts and Nevis  ( San Cristóbal y Nieves) y una dirección en Emiratos Árabes Unidos para incorporar dos entidades fuera de Irán que recibirían pagos en dólares estadounidenses relacionados con el proyecto a nombre de IIHC.