Deutsche Bank debe pagar US$258 millones, nombrar a un monitor independiente y despedir ejecutivos por violar el régimen de sanciones de EE.UU.

Las autoridades federales y del estado de Nueva York, señalaron este miércoles que el Deutsche Bank debe pagar US$258 millones y despedir a seis empleados de alto nivel para resolver las investigaciones de miles de transacciones ilegales con clientes en Irán, Libia, Siria, Myanmar y Sudán.

El banco alemán pagará US$200 millones al Departamento de Servicios Financieros del Estado de Nueva York (DFS por sus siglas en inglés) y US$58 millones a la Reserva Federal. También acordó nombrar a un monitor independiente como parte del acuerdo.

Entre 1999 y 2006, el regulador neoyorquino señaló que el

Deutsche Bank utilizó métodos y prácticas no transparentes para llevar a cabo más de 27.200 operaciones de compensación en dólares en EE.UU. por un valor superior a los US$ 10.860 millones para instituciones financieras de Irán, Libia, Siria, Birmania y Sudán y otras entidades sujetas a sanciones económicas por parte de EE.UU., incluidas entidades en las listas de Nacionales Especialmente Designados de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro de Estados Unidos.

Los empleados del banco sabían acerca de las restricciones de OFAC pero encontraron la manera de eludirlos en pos de lucrativos negocios de dólares estadounidenses para clientes  «lucrativo» negocio dólar estadounidense para los clientes sancionados, dijo la agencia de Nueva York.

El banco eliminó o alteró información de pagos realizados con transacciones en dólares para remover información sobre las partes y países involucrados en estas transacciones.

Los empleados utilizaron “tratamientos especiales” para manejar pagos de partes sancionadas con la intención de evitar que se levanten sospechas en EE.UU., señaló la DFS. Cuando a algunos de los clientes se les cobraba más por el “tratamiento especial” el banco señaló que era necesario que un manejo manual de las transacciones para evitar las sanciones.

Durante las visitas físicas, en correos electrónicos, y durante las llamadas telefónicas, los clientes eran instruidos para incluir notas especiales o palabras en código en sus mensajes de pago que provocarían un tratamiento especial por parte del banco antes de que el pago fuera enviado a Estados Unidos.

A Los clientes sancionados se les dijo que «es esencial para que usted pueda seguir incluir [la nota] ‘No mencionar el nombre de nuestro banco de…’ en los pagos MT103 que pueden involucrar a EE.UU. [Esa nota] asegura que los pagos sean revisados antes de su envío. De lo contrario, es posible que la instrucción [de pago] sea enviada de inmediato a EE.UU. con sus datos completos. . . . [Este proceso] es un resultado directo de las sanciones de Estados Unidos». Los clientes, por su parte, incluían notas en los campos de texto libre de los mensajes SWIFT, tales como» Por favor, no mencione el nombre de nuestro banco o código SWIFT en cualquier mensaje enviado a través de EE.UU.»

Deutsche Bank promocionó sus procedimientos «anti OFAC» entre los clientes y señalaba que tenía más experiencia para evitar sanciones que los bancos asiáticos.

Señala el DFS:

Cierta evidencia indica que al menos un miembro del Consejo de Administración del banco sabía y aprobaba las relaciones comerciales del banco con los clientes sujetos a las sanciones estadounidenses.

Empleados del banco prepararon un manual de capacitación para nuevo personal [de pagos] en oficinas en el extranjero. El manual incluía una sección titulada «Pagos bajo embargo de EE.UU.» que explicaba cómo manejar los pagos con conexión a partes sancionadas.

Un primer borrador incluía una advertencia, en negrita: «Especial atención se le debe dar a las órdenes en las que participan países/instituciones bajo embargos. Los bancos bajo embargo de EE.UU. (por ejemplo, los bancos iraníes) no deben aparecer en cualquier orden de [Deutsche Bank de Nueva York] o cualquier otro banco de origen estadounidense ya que existe el peligro de que la cantidad será congelada en EE.UU.»

Seis empleados involucrados en las violaciones de sanciones todavía trabajan para Deutsche Bank. DFS dijo que «ordenó al banco terminar con esos seis empleados».

Otros tres empleados, según la medida anunciada el miércoles de esta semana, otros tres empleados del banco tienen prohibido “tener responsabilidades, deberes u obligaciones que involucran el cumplimiento, pagos de dólares, o cualquier asunto relacionado con operaciones de EE.UU.”, señala al agencia regulatoria, quien también señaló que otros empleados involucrados en el negocio ilegal han dejado el banco.

El mes pasado, el banco francés Crédit Agricole pagó US$787 millones para llegar a un acuerdo por acusaciones de violar sanciones de EE.UU. contra Sudán, Irán, Myanmar, y Cuba entre 2003 y 2008.

En mayo de este año, otro banco francés, BNP Paribas pagó US$9.000 millones luego de declararse culpable de violar sanciones de EE.UU. contra Sudán, Irán y Cuba.

Lea aquí la orden de consentimiento del Departamento de Servicios Financieros del Estado de Nueva York