Citigroup acuerda pagar US$180 millones para resolver acusaciones de fraude de fondos de cobertura

La Comisión de Bolsa y Valores de EE.UU. (SEC) anunció esta semana que dos filiales de Citigroup han acordado pagar cerca de US$ 180 millones para resolver cargos por haber defraudado a inversionistas en dos fondos de cobertura, que alegaban que eran seguros y de bajo riesgo para inversionistas de bonos. Estos fondos luego se derrumbaron durante el colapso financiero.

Citigroup Global Markets (CGMI) y Citigroup Alternative Investments (CAI) aceptaron asumir todos los costos para distribuir los US$180 millones del acuerdo a los inversionistas que se vieron afectados.

Una investigación de la SEC encontró que las filiales de Citigroup hicieron declaraciones falsas y engañosas a los inversionistas en los fondos ASTA/MAT y Falcon, que en conjunto recaudaron casi US$ 3.000 millones en capital de aproximadamente 4.000 inversionistas antes de derrumbarse. Al comunicarse con los inversionistas no dieron a conocer los riesgos reales de los fondos.

Incluso cuando los fondos comenzaron a colapsar y CAI aceptara casi US$ 110 millones en inversiones adicionales, las filiales de Citigroup no dieron a conocer el estado de dichos fondos y continuaron asegurando a los inversionistas que eran de bajo riesgo, que eran inversiones de alta capitalización con la liquidez adecuada. Muchas de las representaciones engañosas hechas por empleados de Citigroup no correspondían con documentos escritos proporcionados a los inversionistas.

«Las compañías no se pueden desligar de sus responsabilidades, por las tergiversaciones y engaños por parte de sus empleados, invocando la letra chica en los documentos», dijo Andrew Ceresney, Director de la División de Cumplimiento de la SEC. «Asesores de estas filiales de Citigroup deberían haber estado buscando los mejores intereses de los inversionistas, pero engañosamente les aseguraban que estaban haciendo inversiones seguras incluso cuando los fondos estaban al borde del desastre».

Según la orden de la SEC, el fondo ASTA/MAT era un fondo de arbitraje municipal que adquiría deuda municipal y utilizaba un swap del Tesoro o LIBOR como cobertura de riesgo por el tipo de interés y el fondo Falcon era un fondo multi-estrategia que invertía en ASTA / MAT y otras alternativas de renta fija, como los CDO, CLO, y valores respaldados por activos.

Los fondos, ambos altamente apalancados, se ofrecían exclusivamente a los clientes del área de banca privada de Citigroup o Smith Barney  por parte de asesores financieros vinculados con CGMI. Ambos fondos fueron administrados por CAI. Ni Falcon ni ASTA/MAT eran de bajo riesgo similar a una inversión de bonos como se les señaló en varias oportunidades a los inversionistas, según la SEC.

CGMI y CAI no pudieron controlar los engaños hechos a los inversionistas ya que sus empleados engañosamente minimizaron el alto riesgo de pérdida resultante de la estrategia de inversión de los fondos entre otras cosas. CAI no logró adoptar e implementar políticas y procedimientos para impedir que los asesores financieros y gestores de fondos realicen proposiciones contradictorias y falsas.