Nueva estrategia de seguridad cibernética del gobierno de EE.UU. en más de una década se centra en una defensa más rigurosa

Las redes públicas y privadas de las redes de Estados Unidos son amenazadas diariamente por criminales, terroristas y enemigos extranjeros. Ante las crecientes amenazas, el gobierno federal tiene la responsabilidad de hacer su parte para garantizar que Estados Unidos tenga la mejor ciberseguridad del mundo, según la Casa Blanca, la falta de prioridad de la seguridad cibernética tanto por parte del gobierno como de la industria ha dejado a EE.UU. en una situación de vulnerabilidad.

Como resultado, la semana pasada, el presidente firmó la National Cyber Strategy –estrategia cibernética nacional—, la primera estrategia cibernética totalmente articulada para Estados Unidos desde 2003. Estos son los principios clave sobre los que construimos esta Estrategia cibernética nacional:

Ø Protección: tomar medidas específicas para proteger las redes y la información federales, asegurar la infraestructura crítica, combatir la ciberdelincuencia y mejorar los informes de incidentes.

Ø Promoción: respaldar una economía digital vibrante y resistente, fomentar y protejer el ingenio estadounidense, y desarrollar una fuerza laboral de ciberseguridad superior.

Ø Interrupción: identificar, contrarrestar, alterar, degradar y disuadir el comportamiento en el ciberespacio que es desestabilizador y contrario a los intereses nacionales. Mejorar la estabilidad cibernética a través de normas de comportamiento estatal responsable, detectar y responsabilizar por comportamiento inaceptable en el ciberespacio y la imposición de costos a los actores cibernéticos maliciosos.

Ø Preservación: preservar la apertura a largo plazo, la interoperabilidad, la seguridad y la confiabilidad de Internet, al tiempo que se debe respaldar el crecimiento del mercado para infraestructura y tecnologías emergentes y crear capacidad cibernética a nivel internacional.