EE.UU y Holanda imponen una multa astronómica por corrupción a una compañía sueca de telecomunicaciones

Las autoridades de EE.UU. y Holada han impuesto sanciones por US$965 millones a una compañía de telecomunicaciones sueca en un acuerdo global por haber pagado cientos de millones de dólares en sobornos para obtener lucrativos contratos gubernamentales en Uzbekistán.

El Departamento de Justicia de Estados Unidos (DOJ), la Comisión de Bolsa y Valores de EE.UU. y el Ministerio Público de los Países Bajos han negociado el acuerdo de prórroga diferido con Telia Company AB y su filial uzbeka Coscom LLC por pagar más de US$331 millones en sobornos a un funcionario gubernamental en Uzbekistán en violación de la Ley de Prácticas Corruptas en el Extranjero de los Estados Unidos (FCPA, por sus siglas en inglés). En el acuerdo, Telia pagará casi US$ 275 millones al DOJ, casi US$ 460 millones a la SEC y US$274 millones a las autoridades holandesas.

Los sobornos fueron pagados a un funcionario del gobierno de Uzbekistán que era pariente cercano de un alto funcionario del gobierno y que ejercía influencia sobre los reguladores de la industria de las telecomunicaciones de Uzbekistán. Telia y Coscom estructuraron y ocultaron los sobornos a través de varios pagos a una compañía pantalla (shell company) que ciertos ejecutivos de la gerencia de Telia y de Coscom sabían que eran propiedad de un funcionario extranjero. Los sobornos fueron pagados en múltiples ocasiones durante un período de aproximadamente cinco años para que Telia pudiera entrar en el mercado uzbeko y Coscom pudiera obtener valiosos activos de telecomunicaciones y seguir operando en Uzbekistán.

Las compañías acuerdan una resolución coordinada entre el Departamento de Justicia de EE.UU., la Comisión de Valores y Bolsa de Estados Unidos (SEC) y el Reino de los Países Bajos, que representa la segunda resolución más importante relacionada con la corrupción de empresas de telecomunicaciones en Uzbekistán.

Telia Company AB, con sede en Estocolmo, una empresa de telecomunicaciones internacional que previamente cotizaba en bolsa en Estados Unidos, y su filial uzbeka, Coscom LLC, firmaron la resolución global sobre el soborno y acordaron pagar una multa total de más de US$ 965 millones para resolver las acusaciones que surgen de un ardid para pagar sobornos en Uzbekistán.

La SEC de Estados Unidos y el Ministerio Público de los Países Bajos (Openbaar Ministrie, OM) anunciaron acuerdos separados con Telia en relación con procedimientos relacionados. Según los términos de su resolución con la SEC, Telia acordó un total de US$ 457 millones en concepto de disgorgement (devolución) de ganancias e intereses previos, y la SEC accedió a acreditar las devoluciones (digorgements) que Telia pague a la Autoridad Fiscal de Suecia (SPA) u OM, hasta la mitad del total. Telia acordó pagar a la OM una sanción penal de US$ 274,000,000 por una sanción penal por un total de US$ 548.603.972, y una cantidad de resolución total de más de US$ 1.000 millones.

El Departamento de Justicia acordó acreditar la sanción penal pagada a la OM como parte de su acuerdo con la empresa. La SEC acordó acreditar los US$ 40 millones de decomiso pagados al Departamento de Justicia como parte de su acuerdo con la compañía. De esta forma, la cantidad total combinada de sanciones penales y administrativas pagadas por Telia y Coscom a las autoridades de Estados Unidos, Holanda y Suecia será de $ 965.773.949.

De acuerdo con las admisiones de las compañías a través de varios gerentes y empleados dentro de Telia, Coscom y entidades afiliadas, las compañías pagaron aproximadamente US$331 millones en sobornos a un funcionario del gobierno de Uzbekistán, pariente cercano de un funcionario gubernamental de alto rango y tenía influencia sobre el organismo gubernamental uzbeco que regulaba la industria de las telecomunicaciones.

Las compañías estructuraron y ocultaron los sobornos a través de varios pagos, incluyendo a una compañía fantasma que ciertos administradores de Telia y Coscom sabían que era de propiedad beneficiaria del funcionario extranjero. Los sobornos fueron pagados en varias ocasiones entre aproximadamente 2007 y 2010, para que Telia pudiera entrar en el mercado uzbeco y Coscom pudiera adquirir ganar valiosos activos de telecomunicaciones y seguir operando en Uzbekistán.

Ciertos ejecutivos de Telia y Coscom también contemplaron la estructuración de un pago de soborno adicional a finales de 2012, después de que los medios suecos comenzaron a informar sobre los pagos corruptos de Telia en Uzbekistán, las autoridades suecas iniciaron una investigación criminal y Telia abrió una investigación interna.

Varios factores importantes contribuyeron a la resolución del Departamento de Justicia con las empresas. Entre ellas, las empresas recibieron un crédito significativo por sus amplias medidas correctivas y su cooperación con la investigación.

La resolución, alcanzada en coordinación entre la SEC y las autoridades de los Países Bajos, marca la segunda resolución de este tipo con un importante proveedor internacional de telecomunicaciones por soborno en Uzbekistán. El 18 de febrero de 2016, VimpelCom Limited, con sede en Amsterdam, y su filial uzbeka, Unitel LLC, también firmaron acuerdos con el Departamento de Justicia y admitieron una conspiración para hacer más de US$ 114 millones en pagos de soborno al mismo funcionario uzbeko entre 2006 y 2012.

Hasta la fecha, la investigación arrojó un total combinado de más de US$1.760 millones en multas globales y disgorgement (devoluciones), incluyendo más de US$500 millones en sanciones penales del Departamento de Justicia. En las acciones conexas, el Departamento de Justicia también ha presentado demandas civiles buscando la devolución de más de US$ 850 millones en cuentas bancarias en Suiza, Bélgica, Luxemburgo e Irlanda, que constituyen pagos de soborno hechos por VimpelCom, Telia y una tercera compañía de telecomunicaciones o fondos involucrados en el lavado de esos pagos corruptos, en beneficio del funcionario uzbeco.