Corrupción podría bloquear el gol de la Copa Mundial en Brasil

[private]Por Daniela Guzman
Mayo 23, 2014

En 2007, cuando se designó a Brasil como el país que albergaría la Copa Mundial de la FIFA que se realiza el próximo mes, oficiales encargados del evento propusieron una visión de modernidad, prosperidad y eficiencia. El equipo que ha ganado el torneo más veces que cualquier otro país también tendría la oportunidad de exponer su vitalidad económica como un mercado nacional emergente en un escenario global.

Siete años después de ganar la sede, la realidad en Brasil se queda corta de esa visión. El auditor fiscal del gobierno de Brasil compartió un reporte con la Prensa Asociada cuyo revela una prodigalidad sistémica, un desperdicio de fondos públicos, corrupción política y gastos astronómicos.

La revisión de cuentas indica que la construcción y los proyectos de infraestructura promulgados por la Copa Mundial tal vez han sido un vehículo para sobornos, fraudes corporativos, y otros crímenes financieros, cuales se han infiltrado a través de los sectores públicos y privados.

Reporte revela fraude y abusos políticos en las preparaciones de la Copa Mundial

La Corte Federal de Cuentas Brasileña, conocida como el Tribunal de Contas da União en portugués, es el regulador fiscal principal del país. La Prensa Asociada analizo el reporte de 140 páginas, incluyendo los gastos excesivos, facturación fraudulenta y contribuciones turbias a campañas políticas. La auditoría también expuso $275 millones de dólares debidos a la manipulación de precios, y otros $500 millones en gastos cuestionables. Además, fue revelado que $2,3 millones de materiales fueron cotizados repetidamente en la facturación.

Cuando oficiales presentaron la candidatura de Brasil para la sede, se dijo que el financiamiento también se recaudaría del sector privado. Sin embargo, fondos públicos derivados de impuestos han pagado la cuenta de construir el estadio segundo más caro del mundo. El estadio de Brasilia, la capital del país, cuesta más de tres veces de las estimaciones iniciales, por un total de $900 millones de dólares. El reporte declara que un tercio de los gastos de la Copa Mundial vienen de precios inflados.

El estadio de Brasilia, cuyo no alojará un equipo local después del torneo, es solo uno de los 12 estadios que se han construido con fondos públicos. Según el reporte, el precio de construir o reparar los estadios se ha multiplicado cuatro veces desde el primer presupuesto hecho por la FIFA.

El costo total de la Copa Mundial es $11,5 billones – eso es cuatro millones menos del precio estimado de los Juegos Olímpicos, que serán radicadas en Rio de Janeiro, Brasil. Entre los presupuestos para los dos eventos, $8 billones de dólares fueron asignados para proyectos nuevos de infraestructura. Nuevos sistemas de transporte, proyectos de vivienda, aeropuertos y terminales modernos fueron planeados para armar apoyo para los eventos. Sin embargo, muchos proyectos de urbanización se aplazaron y no estarán terminados hasta después de la Copa Mundial, o se cancelaron completamente. La FIFA reporta que no ha visto una Copa Mundial más atrasada en cuatro décadas.

Financiamiento de campañas políticas incita sospechas de corrupción

Es aparente que por más que este decepcionante el panorama antes de la copa mundial, alguien le está sacando provecho a estos proyectos de construcción. En el 2010, la empresa Andrade Gutiérrez gano cuatro contratos para construir cuatro estadios. Ese año, Andrade Gutiérrez aumentó sus contribuciones a campañas políticas 500 veces más de lo que contribuyo el año anterior, más que todo para partidos en los municipios donde los estadios serian construidos. Andrade Gutiérrez y Via Engenharia, la empresa de ingeniería más grande de Brasil, formarían un conglomerado que dominaría la mayoría de proyectos para la Copa Mundial. A fin de cuentas, Andrade Gutiérrez contribuyo $37,1 millones de dólares a campañas políticas.

Donaciones que vienen de las corporaciones son vitales para el financiamiento de campañas políticas en Brasil. En las más recientes elecciones presidenciales, la presidenta Dilma Rousseff y su principal rival recibieron 98 por ciento de sus fondos a través de corporaciones, según un análisis hecho por la ONG Transparencia Internacional. Contribuciones de empresas se depositan en una sola cuenta para cada partido político, cual confunde el beneficiario del dinero.

Cristina Spera del Instituto Ethos de Negocios y Responsabilidad Social dice que por otro lado, un gran avance es la propuesta del Congreso para prohibir que las corporaciones donen a las campañas políticas. Se votó por este cambio el mes pasado pero la implementación será aplazada hasta después de las elecciones de este ano, después de la Copa Mundial.

Spera explicó que esta noción de impedir las donaciones corporativas viene de las mismas empresas.

“Las elecciones están volviéndose muy caras para las empresas,” dijo Spera. “Ya no se pueden dar el lujo de pagar para estas campañas.”

Odebrecht, la empresa de construcción principal del país, ganó contratos para construir otros cuatro estadios, después de donar $11,6 millones de dólares a campañas políticas en el 2010. La empresa también gano un contrato para operar el famoso estadio de Maracaná en Rio de Janeiro por los próximos 35 años.

Corrupción en el gobierno plaga a Brasil

La campaña electoral de la Presidenta Rousseff en 2010 destaco la batalla contra la corrupción. Transparencia International clasifico 177 países en su Índice de Percepciones sobre Corrupción, y Brasil recibió un 42, colocándolo en el intervalo de países “algo corruptos”.

En una encuesta conducida por Transparencia Internacional, los partidos políticos fueron designados los grupos más corruptos en Brasil por sus ciudadanos. Los datos respaldan ese sentimiento. Cuarenta por ciento de los miembros del Congreso Federal tienen casos criminales pendientes, según un grupo de vigilancia gubernamental llamada Congresso em Foco.

En el 2012, el tema de la corrupción pública se destacó cuando el anterior Presidente, Luiz Inácio Lula da Silva, y miembros de su administración, fueron investigados por están involucrados en una esquema de soborno orquestada por el partido político del presidente. El escándalo de mensalão, que en portugués quiere decir una recompensa mensual, se intensifico cuando un informante revelo que el Partido de Trabajadores había pagado varios deputados del congreso alrededor de $12,000 dólares cada mes a cambia de votos para legislación favorecida por el partido dominante.

Al final del tribunal, 25 de 37 acusados fueron declarados culpables y tres recibieron sentencias de cárcel, en una decisión histórica por la Corte Suprema de Brasil. A pesar de este abuso de confianza, Lula fue reelegido en el 2006.

Con todo, el país está tomando pasos para mejorar el cumplimiento de estándares anti-corrupción entre el sector público. La oficina del auditor federal despidió a 4,000 empleados de servicio público de 2003 a 2012 debidos a prácticas deshonestas.

Enredo de agencias regulatorias impide esfuerzos contra la corrupción

À Brasil no le faltan agencias regulatorias, pero analices recientes demuestran que esto incluso le pone obstáculos a los esfuerzos contra la corrupción. Para desenredar los procesos burocráticos complejos, es probable que el sector privado use sobornos. Además, el embrollo de agencias que supervisan el sector privado en Brasil tiene historia de escaso cumplimiento.

Una ley implementada este año en Brasil no soluciona el dilema burocrático, pero si responsabiliza a las empresas, no solo a las personas, que están involucradas en negocios corruptos, sean domésticos o en el ámbito internacional. La ley de “empresas limpias” puede prohibir que la empresa implicada firme contratos con el gobierno, corta el acceso a instituciones financieras operadas por el estado, y cobrar hasta 20 por ciento de sus ingresos brutos.

El procedimiento de la aplicación de esta ley permanece incierto. Sin embargo, la amenaza de multas altas y otros riesgos puede hacer que las empresas Brasileñas con operaciones internacionales mejoren su cumplimiento de anti-corrupción.

Vigilantes del gobierno se enfocan en excesos fiscales

Varias agencias están vigilando el gobierno por el alto potencial para corrupción y fraude en relación a los proyectos de la Copa Mundial. Desde el 2010, el gobierno ha utilizado una plataforma online llamada el Portal de Transparencia, cuyo permite que ciudadanos rastren los fondos públicos designados por el gobierno federal. Fondos transferidos entre estados o municipios y detalles de obtención están disponibles al público.

El Instituto Ethos siguió el ejemplo con la creación de una iniciativa llamada Juegos Limpios Adentro y Afuera de los Estadios para promover transparencia al público en relación al dinero invertido en la Copa Mundial y los Juegos Olímpicos. El proyecto (una inversión de $3,1 millones de dólares) estableció acuerdos para regulación interna en las industrias conectados a la Copa Mundial y los Juegos Olímpicos. La organización creo indicadores de transparencia para diferentes municipios en un reporte que salió el 22 de mayo.

Ganancias sospechosas de la Copa Mundial podrán aumentar el riesgo de lavado de dinero

Cuando la anticipación alrededor de la Copa Mundial se calme, la cuestión de cumplimiento permanecerá importante para instituciones financieras, agencias regulatorias y el gobierno Brasileño.

Los fondos generados de prácticas corruptas y delitos financieros eventualmente tendrán que penetrar el sistema financiero legítimo. Por eso, el riesgo de lavado de dinero podría aumentar para las instituciones financieras.

Últimamente, Brasil ha tomado medidas para mejorar la regulación contra el lavado de dinero. El Grupo de Acción Financiera (GAFI) evaluó a Brasil en el 2010, indicando que cumple con 3 y cumple en gran parte con 21 de las recomendaciones 40+9 designadas por la organización. Cumple parcialmente o no cumple con 3 de las 6 recomendaciones principales. Brasil es un país miembro de GAFI y GAFISUD, el grupo regional, y ha desarrollado una estrategia nacional para combatir el lavado de dinero llamada la Estrategia Nacional Contra Corrupción y Lavado de Dinero (ENCCLA). Con este plan, congreso ha creado un proyecto de ley para enmendar la ley de lavado de dinero de 1998 para criminalizar el financiamiento de grupos terroristas. Sin embargo, aún no se puede enjuiciar el financiamiento de terroristas como un cargo solitario. Un sistema de cortes federales especializadas ha mejorado el enjuiciamiento de ofensas de lavado de dinero.

El sistema financiero parece tener un gran riesgo para el lavado de dinero en los sectores de cambio internacional y bancario privado, según un reporte de GAFI de 2010. La estrategia contra el lavado de dinero está en línea con requisitos internacionales, pero el número de acciones judiciales, convicciones y sentencias es relativamente baja comparado al tamaño del país.[/private]